Sí, el dinero sí compra la felicidad pero tiene un límite, arriba de éste no hay gran diferencia en los niveles de satisfacción y hasta podrían decrecer, de acuerdo con estudios de los Nobel 2015, Angus Deaton, y 2002, Daniel Kahnema.
Banca y Negocios
¿Más dinero equivale a más felicidad? Parece que sí, pero tiene un límite: 75 mil dólares al año (por lo menos en Estados Unidos), de acuerdo con estudios realizados por el recién designado Nobel de Economía Angus Deaton.
Cass R. Sunstein, ex administrador de la Casa Blanca para Asuntos Regulatorios, explica en una columna en Bloomberg Views que hay dos formas de indagar el bienestar de una persona: cuestionando a la gente sobre la vida en general o buscando experiencias reales con preguntas acerca de sus niveles de estrés, tristeza, felicidad y el goce durante el día. Y la pregunta de si el dinero compra la felicidad tiene resultados diferentes.
“Deaton, en coautoría con Daniel Kahneman (Premio Nobel en 2002), encontró que en Estados Unidos la respuesta depende de la pregunta que se utiliza. Si se les pregunta a las personas acerca de su satisfacción con la vida en general el dinero definitivamente importa. Si el ingreso anual de una persona sube, su percepción subjetiva sobre su satisfacción también aumenta.
“Pero no pasa lo mismo con experiencias reales. A mayores ingresos sin duda hay menos tristeza y mayor felicidad pero hasta los 75 mil dólares (anuales), arriba de esta cifra el nivel de felicidad es independiente a los ingresos”, explica Sunstein.
Por debajo de este umbral, muchas de las desgracias de la vida tienen un impacto negativo mucho mayor, por ejemplo, divorciarse, tener asma o estar solo tienen efectos mucho más graves, e incluso los beneficios de los fines de semana resultan inferiores, reseñó elfinanciero.com.mx
“¿Por qué? Deaton y Kahneman no lo saben a ciencia cierta, pero especulan que por encima de cierto límite, el aumento de los ingresos no impacta mucho en la capacidad de las personas para participar en actividades que son más importantes, como pasar el tiempo con amigos, disfrutar de una buena salud y tomar tiempo libre del trabajo.
“Además sugieren que en cierto punto, más dinero podría tener algunos efectos negativos, como una disminución en la capacidad para disfrutar de pequeños placeres”.
La academia dijo que el trabajo de Deaton había sido una gran influencia en la toma de decisiones políticas, ayudando, por ejemplo, a determinar cuáles grupos sociales son afectados por un incremento al IVA sobre alimentos.
Recibe nuestras actualizaciones por E-Mail. SUSCRÍBETE GRATIS AQUI
Twittear |