La idea de reabrir el mercado permuta es "dar mayor fluidez al mercado de divisas y flexibilizarlo", según señaló el diputado Sanguino Mariana Martínez / elmundo.com.ve La vuelta del mercado permuta es un hecho. El Banco Central de Venezuela (BCV) y el Ministerio de Finanzas tienen listo el proyecto para la reapertura de este mecanismo que estaría operativo para el mes de diciembre y que volverá a funcionar bajo el ojo vigilante del Estado, según aseguran fuentes del instituto emisor. Sus operadores serán las casas de bolsa que tengan la autorización, y la banca que, hasta el momento ha sido la única intermediaria en las políticas cambiarias establecidas por el Ejecutivo desde el cierre del mercado permuta en 2010. Tal decisión ameritaría también "despenalizar" estas operaciones que estaban prohibidas en la Ley de Ilícitos Cambiarios y en la Ley del Mercado de Valores. Por lo que trabajan en la revisión del marco legal en conjunto con la Asamblea Nacional (AN). El presidente de la Comisión de Finanzas, Ricardo Sanguino, confirmó que ya tienen una primera propuesta de reforma de estos dos instrumentos legales, que se orientan a modificaciones desde el punto de vista operativo que, en ambas normas, impedían este tipo de operaciones, al tiempo que se aumentan las sanciones a quienes incurran en actos tipificados como delito. Dijo que se trata de precisar la aplicación de la ley "Lo importante es que las leyes se desarrollan y tienen un tiempo de aplicación, y una vez que ha cesado el motivo por el cual fueron creadas, entonces surgen otros instrumentos que se ajustan a las nuevas realidades", indicó el asambleísta. La idea de reabrir el mercado permuta es "dar mayor fluidez al mercado de divisas" y "flexibilizarlo", según señaló. Sanguino, quien no ahondó en los detalles de las modificaciones de ambas normas, señaló que entre lo que se estaría reformando en la Ley de Ilícitos Cambiarios es el aspecto que establece que es el BCV el organismo que tiene las competencias para definir y normar las operaciones con títulos valores de la República, mientras que sería el Ministerio de Finanzas el que tipifique los delitos. Cosa que ya ocurre. En el caso de las sanciones, el diputado dijo que la ley será más rigurosa y específica: las penas de cárcel aumentan; por ejemplo, quienes obtengan divisas bajo engaño, alegando causas falsas o valiéndose de cualquier medio fraudulento, pueden pagar entre 6 y 14 años de prisión. En la ley aún vigente este delito es penado, además de las medidas administrativas, con 3 a 7 años de prisión. Además, se incluye a la Superintendencia de Valores entre los entes supervisores, así como la autorización de las operadoras; se define lo que son grupos de delincuencia organizada; se establecerá que ante las autoridades de aduana y no la autoridad cambiaria donde se reportarán las personas naturales y jurídicas que importen o exporten, ingresen o egresen desde y hacia el territorio venezolano más de $10.000 o su equivalente en otras divisas. La aduana lo comunicará a los entes con competencia. Debatirá la AN Aunque se dijo que estas reformas podrían ser analizadas en la Habilitante que solicitaría el presidente Nicolás Maduro, ahora es un trabajo que hacen en conjunto la AN y el Ejecutivo, y que se espera que sea revisado y debatido al regreso del receso parlamentario. Los equipos técnicos deben revisar todo el marco jurídico del sistema financiero nacional para verificar que no existan contradicciones que generen trabas. El propio ministro de Finanzas, Nelson Merentes, señaló estar confiado en que existe consenso entre opositores y oficialistas en el Parlamento para "hacer cosas que aceleren la mejor conducta de la economía". Así lo afirmó en entrevista con José Vicente Rangel. "El Parlamento trabaja en adaptarlas al momento y se espera que trascienda la coyuntura". Drenar las divisas El ministro de Finanzas también aseguró que la Ley de Ilícitos Cambiarios "no ha cumplido los objetivos correspondientes" y que el mercado estaba "perturbado"; por tal motivo, dijo que ambas leyes debían ser reformadas, "trabajar el tema en conjunto con los empresarios y los inversionistas y drenar". Fuentes del Ejecutivo, por su parte, aseguran que efectivamente el Gobierno debe "drenar las presiones del mercado". Pues no sólo las leyes han sido infructuosas, también han sido insuficientes las medidas tomadas por el Ejecutivo para detener el mercado no oficial y atender las necesidades de divisas. Deben atender el desabastecimiento de productos, la inflación que toca niveles históricos y una divisa no oficial desbordada que es el marcador de la economía. Existe además una Bolsa Pública de Valores cuyas capacidades están subestimadas, que funciona con operaciones muy limitadas. Mientras, las empresas de capital extranjero no pueden repatriar sus dividendos y acumulan grandes cantidades de bolívares, que hacen poco atractivo invertir en Venezuela.
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jueves, 5 de septiembre de 2013
BCV afina regreso del dólar permuta
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La idea de reabrir el mercado permuta es "dar mayor fluidez al mercado de divisas y flexibilizarlo", según señaló el diputado Sanguino Mariana Martínez / elmundo.com.ve La vuelta del mercado permuta es un hecho. El Banco Central de Venezuela (BCV) y el Ministerio de Finanzas tienen listo el proyecto para la reapertura de este mecanismo que estaría operativo para el mes de diciembre y que volverá a funcionar bajo el ojo vigilante del Estado, según aseguran fuentes del instituto emisor. Sus operadores serán las casas de bolsa que tengan la autorización, y la banca que, hasta el momento ha sido la única intermediaria en las políticas cambiarias establecidas por el Ejecutivo desde el cierre del mercado permuta en 2010. Tal decisión ameritaría también "despenalizar" estas operaciones que estaban prohibidas en la Ley de Ilícitos Cambiarios y en la Ley del Mercado de Valores. Por lo que trabajan en la revisión del marco legal en conjunto con la Asamblea Nacional (AN). El presidente de la Comisión de Finanzas, Ricardo Sanguino, confirmó que ya tienen una primera propuesta de reforma de estos dos instrumentos legales, que se orientan a modificaciones desde el punto de vista operativo que, en ambas normas, impedían este tipo de operaciones, al tiempo que se aumentan las sanciones a quienes incurran en actos tipificados como delito. Dijo que se trata de precisar la aplicación de la ley "Lo importante es que las leyes se desarrollan y tienen un tiempo de aplicación, y una vez que ha cesado el motivo por el cual fueron creadas, entonces surgen otros instrumentos que se ajustan a las nuevas realidades", indicó el asambleísta. La idea de reabrir el mercado permuta es "dar mayor fluidez al mercado de divisas" y "flexibilizarlo", según señaló. Sanguino, quien no ahondó en los detalles de las modificaciones de ambas normas, señaló que entre lo que se estaría reformando en la Ley de Ilícitos Cambiarios es el aspecto que establece que es el BCV el organismo que tiene las competencias para definir y normar las operaciones con títulos valores de la República, mientras que sería el Ministerio de Finanzas el que tipifique los delitos. Cosa que ya ocurre. En el caso de las sanciones, el diputado dijo que la ley será más rigurosa y específica: las penas de cárcel aumentan; por ejemplo, quienes obtengan divisas bajo engaño, alegando causas falsas o valiéndose de cualquier medio fraudulento, pueden pagar entre 6 y 14 años de prisión. En la ley aún vigente este delito es penado, además de las medidas administrativas, con 3 a 7 años de prisión. Además, se incluye a la Superintendencia de Valores entre los entes supervisores, así como la autorización de las operadoras; se define lo que son grupos de delincuencia organizada; se establecerá que ante las autoridades de aduana y no la autoridad cambiaria donde se reportarán las personas naturales y jurídicas que importen o exporten, ingresen o egresen desde y hacia el territorio venezolano más de $10.000 o su equivalente en otras divisas. La aduana lo comunicará a los entes con competencia. Debatirá la AN Aunque se dijo que estas reformas podrían ser analizadas en la Habilitante que solicitaría el presidente Nicolás Maduro, ahora es un trabajo que hacen en conjunto la AN y el Ejecutivo, y que se espera que sea revisado y debatido al regreso del receso parlamentario. Los equipos técnicos deben revisar todo el marco jurídico del sistema financiero nacional para verificar que no existan contradicciones que generen trabas. El propio ministro de Finanzas, Nelson Merentes, señaló estar confiado en que existe consenso entre opositores y oficialistas en el Parlamento para "hacer cosas que aceleren la mejor conducta de la economía". Así lo afirmó en entrevista con José Vicente Rangel. "El Parlamento trabaja en adaptarlas al momento y se espera que trascienda la coyuntura". Drenar las divisas El ministro de Finanzas también aseguró que la Ley de Ilícitos Cambiarios "no ha cumplido los objetivos correspondientes" y que el mercado estaba "perturbado"; por tal motivo, dijo que ambas leyes debían ser reformadas, "trabajar el tema en conjunto con los empresarios y los inversionistas y drenar". Fuentes del Ejecutivo, por su parte, aseguran que efectivamente el Gobierno debe "drenar las presiones del mercado". Pues no sólo las leyes han sido infructuosas, también han sido insuficientes las medidas tomadas por el Ejecutivo para detener el mercado no oficial y atender las necesidades de divisas. Deben atender el desabastecimiento de productos, la inflación que toca niveles históricos y una divisa no oficial desbordada que es el marcador de la economía. Existe además una Bolsa Pública de Valores cuyas capacidades están subestimadas, que funciona con operaciones muy limitadas. Mientras, las empresas de capital extranjero no pueden repatriar sus dividendos y acumulan grandes cantidades de bolívares, que hacen poco atractivo invertir en Venezuela.
La idea de reabrir el mercado permuta es "dar mayor fluidez al mercado de divisas y flexibilizarlo", según señaló el diputado Sanguino Mariana Martínez / elmundo.com.ve La vuelta del mercado permuta es un hecho. El Banco Central de Venezuela (BCV) y el Ministerio de Finanzas tienen listo el proyecto para la reapertura de este mecanismo que estaría operativo para el mes de diciembre y que volverá a funcionar bajo el ojo vigilante del Estado, según aseguran fuentes del instituto emisor. Sus operadores serán las casas de bolsa que tengan la autorización, y la banca que, hasta el momento ha sido la única intermediaria en las políticas cambiarias establecidas por el Ejecutivo desde el cierre del mercado permuta en 2010. Tal decisión ameritaría también "despenalizar" estas operaciones que estaban prohibidas en la Ley de Ilícitos Cambiarios y en la Ley del Mercado de Valores. Por lo que trabajan en la revisión del marco legal en conjunto con la Asamblea Nacional (AN). El presidente de la Comisión de Finanzas, Ricardo Sanguino, confirmó que ya tienen una primera propuesta de reforma de estos dos instrumentos legales, que se orientan a modificaciones desde el punto de vista operativo que, en ambas normas, impedían este tipo de operaciones, al tiempo que se aumentan las sanciones a quienes incurran en actos tipificados como delito. Dijo que se trata de precisar la aplicación de la ley "Lo importante es que las leyes se desarrollan y tienen un tiempo de aplicación, y una vez que ha cesado el motivo por el cual fueron creadas, entonces surgen otros instrumentos que se ajustan a las nuevas realidades", indicó el asambleísta. La idea de reabrir el mercado permuta es "dar mayor fluidez al mercado de divisas" y "flexibilizarlo", según señaló. Sanguino, quien no ahondó en los detalles de las modificaciones de ambas normas, señaló que entre lo que se estaría reformando en la Ley de Ilícitos Cambiarios es el aspecto que establece que es el BCV el organismo que tiene las competencias para definir y normar las operaciones con títulos valores de la República, mientras que sería el Ministerio de Finanzas el que tipifique los delitos. Cosa que ya ocurre. En el caso de las sanciones, el diputado dijo que la ley será más rigurosa y específica: las penas de cárcel aumentan; por ejemplo, quienes obtengan divisas bajo engaño, alegando causas falsas o valiéndose de cualquier medio fraudulento, pueden pagar entre 6 y 14 años de prisión. En la ley aún vigente este delito es penado, además de las medidas administrativas, con 3 a 7 años de prisión. Además, se incluye a la Superintendencia de Valores entre los entes supervisores, así como la autorización de las operadoras; se define lo que son grupos de delincuencia organizada; se establecerá que ante las autoridades de aduana y no la autoridad cambiaria donde se reportarán las personas naturales y jurídicas que importen o exporten, ingresen o egresen desde y hacia el territorio venezolano más de $10.000 o su equivalente en otras divisas. La aduana lo comunicará a los entes con competencia. Debatirá la AN Aunque se dijo que estas reformas podrían ser analizadas en la Habilitante que solicitaría el presidente Nicolás Maduro, ahora es un trabajo que hacen en conjunto la AN y el Ejecutivo, y que se espera que sea revisado y debatido al regreso del receso parlamentario. Los equipos técnicos deben revisar todo el marco jurídico del sistema financiero nacional para verificar que no existan contradicciones que generen trabas. El propio ministro de Finanzas, Nelson Merentes, señaló estar confiado en que existe consenso entre opositores y oficialistas en el Parlamento para "hacer cosas que aceleren la mejor conducta de la economía". Así lo afirmó en entrevista con José Vicente Rangel. "El Parlamento trabaja en adaptarlas al momento y se espera que trascienda la coyuntura". Drenar las divisas El ministro de Finanzas también aseguró que la Ley de Ilícitos Cambiarios "no ha cumplido los objetivos correspondientes" y que el mercado estaba "perturbado"; por tal motivo, dijo que ambas leyes debían ser reformadas, "trabajar el tema en conjunto con los empresarios y los inversionistas y drenar". Fuentes del Ejecutivo, por su parte, aseguran que efectivamente el Gobierno debe "drenar las presiones del mercado". Pues no sólo las leyes han sido infructuosas, también han sido insuficientes las medidas tomadas por el Ejecutivo para detener el mercado no oficial y atender las necesidades de divisas. Deben atender el desabastecimiento de productos, la inflación que toca niveles históricos y una divisa no oficial desbordada que es el marcador de la economía. Existe además una Bolsa Pública de Valores cuyas capacidades están subestimadas, que funciona con operaciones muy limitadas. Mientras, las empresas de capital extranjero no pueden repatriar sus dividendos y acumulan grandes cantidades de bolívares, que hacen poco atractivo invertir en Venezuela.