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lunes, 22 de julio de 2013

¿Por qué suben los precios?




En Venezuela se mezclan todos los ingredientes que impulsan la inflación.

Ver Luego:
  • "La inflación marcha al ritmo del dólar paralelo"
  • EL UNIVERSAL

    LA_INUNDACIÓN. Decidido a crear sensación de prosperidad en 2012, año en el que Hugo Chávez tuvo como objetivo principal resultar victorioso en las elecciones presidenciales, el Gobierno abrió las compuertas del gasto e inyectó una gran cantidad de dinero a la economía.

    En una porción importante los nuevos billetes y monedas que ingresaron a la economía se imprimieron en el Banco Central porque la recaudación de impuestos, el ingreso proveniente del endeudamiento y lo que reportó el petróleo no fue suficiente para suministrar la dosis deseada.

    En solo doce meses la cantidad de dinero en la economía creció 60%, el consumo se puso en marcha y más bolívares detrás de una cantidad de productos que no puede aumentar al mismo ritmo se traduce en alzas de precios.

    Este efecto no es inmediato, por eso comenzó a sentirse con fuerza a partir de octubre de 2012 y los primeros seis meses de este año.

    DÓLAR DISPARADO. El aumento en los gastos del Gobierno superó al ingreso en una proporción gigante de 14% del PIB, de acuerdo con Bank of America (el Ministerio de Finanzas no ha publicado cifras oficiales sobre este aspecto).

    Durante 2012 el Gobierno cubrió el déficit con endeudamiento e imprimiendo bolívares en el Banco Central pero este esquema se hizo insostenible así que devaluó la moneda para obtener más bolívares por cada petrodólar.

    Además la devaluación fue necesaria porque por mucho tiempo se mantuvo fijo el precio del dólar y las importaciones se dispararon hasta niveles sumamente elevados, en 2012 alcanzaron la cifra récord de 59 mil 339 millones de dólares.

    La devaluación encarece el costo del dólar y por ende de los productos importados, algo que añade gasolina al carro de la inflación.

    El ajuste se ha concretado en varios frentes. El 8 de febrero el tipo de cambio al que Cadivi vende los dólares para importaciones esenciales aumentó 46,5% desde 4,30 bolívares hasta 6,30.

    Pero los dólares no se venden únicamente por Cadivi, también existe otro mecanismo que complementa el sistema y hasta el año pasado se llamó Sitme y proveía dólares a un precio de 5,30 bolívares.

    El Sitme fue eliminado en febrero y para sustituirlo se creó el Sicad, un sistema que ha comenzado a subastar dólares para las empresas a un tipo de cambio de 10,9 bolívares para las empresas y 11,7 bolívares para las personas.

    El resultado es que en el mecanismo que complementa a Cadivi ha habido una devaluación de 100% que también aumentará el precio de una serie de productos e insumos importados.

    Hay más. Junto a Cadivi y el Sitme convive el mercado paralelo o ilegal donde el desequilibrio que genera la gran cantidad de bolívares en búsqueda de divisas ha derivado en una disparada del billete verde que también impulsa la inflación porque los comerciantes que no saben si recibirán dólares al tipo de cambio oficial fijan sus precios de acuerdo con este parámetro.

    Históricamente en todos los años en que Venezuela ha sufrido una devaluación de gran magnitud como la de 2013 la economía cae en un ciclo de alta inflación y mínimo crecimiento económico, una combinación que técnicamente recibe el nombre de estanflación.

    SIN DIVISAS. El desequilibrio entre la oferta y la demanda empeora porque el Gobierno disminuyó la cantidad de dólares que pueden comprar las empresas para traer al país productos importados o adquirir insumos que les permiten producir.

    En febrero se cerró el Sitme, un mecanismo que durante 2012 le inyectó a la economía 7 mil 500 millones de dólares y el Banco Central no aumentó la disponibilidad de divisas para Cadivi.

    El resultado fue el salto de la escasez de productos básicos ante lo cual el Gobierno creó un sustituto para el Sitme, el Sicad, pero por ahora todo indica que este sistema no aliviará la sequía de dólares en la economía.

    A través del Sicad el Banco Central convocará al menos a dos subastas de divisas al mes y en la primera convocatoria ofertó 215 millones de dólares, una cifra que no constituye una buena señal.

    Si solo se realizan dos subastas al mes, como está programado, y se mantiene este monto el Sicad le inyectará a la economía 2 mil 400 millones de dólares durante lo que resta del año, algo que no soluciona la escasez de divisas.

    En teoría el Ejecutivo tiene divisas en una serie de fondos como el Fonden que pueden ser utilizadas para aumentar la oferta de dólares, pero hasta ahora la restricción y los problemas para importar continúan.

    Analistas consideran que la falta de dólares obedece a que Petróleos de Venezuela enfrenta problemas de producción, cobra una porción de los barriles con descuento y la demanda de dólares sigue siendo muy elevada porque a pesar de la devaluación el tipo de cambio sigue estando barato.

    MENOS PRODUCCIÓN. En un entorno donde hay escasez de dólares para importar insumos y empresas que han pasado a manos del Estado reportan caída en su producción, la economía sufre una merma importante en la oferta.

    En su reporte sobre el primer trimestre de este año el Banco Central admite que "en la manufactura del sector público se apreció una contracción de 12,1%, determinada por los problemas laborales, operativos y financieros que conllevaron al descenso en las ramas que la conforman".

    Al mismo tiempo la manufactura privada retrocede y registró un descenso de 2,9% en los primeros tres meses del año. De las 16 categorías en las que el Banco Central divide a la industria manufacturera privada en nueve la producción es inferior a la de 1997, algo que no ayuda a incrementar la oferta y diversificar las exportaciones.

    t La industria automotriz atraviesa uno de sus peores momentos. En el primer semestre apenas se ensamblaron 36 mil 919 vehículos, una cifra que representa una caída de 36,39% respecto al mismo lapso de 2012.

    Algunas plantas han considerado, incluso, ensamblar sólo tres días a la semana y dedicar los otros dos a entrenamiento del personal para "dosificar" el inventario de material de ensamblaje.

    Las fallas en el suministro de semillas para el sector agrícola también ha derivado en caída de la producción en rubros importantes.

    EL DESCONTROL. Para tratar de frenar la incesante aceleración de la inflación el Gobierno mantiene controlado el precio de una amplia gama de alimentos, medicinas y productos de cuidado personal, pero la respuesta de la economía no es la esperada.

    Las estadísticas del Banco Central registran que en el primer semestre de este año el precio de los productos regulados acumula un salto de 20,6% que triplica al del mismo lapso de 2012 y es el más elevado en los últimos seis años.

    En 2013 las autoridades solo han permitido incrementos en el precio de la leche, pollo, carne y quesos pero la experiencia indica que cuando transcurre un largo tiempo sin que se reconozca la variación en la estructura de costos los comercios, distribuidores o productores no respetan el control.

    A pesar de que el control no se ha cumplido de manera estricta, existen empresas que disminuyen la producción por no cubrir sus costos o no contar con suficientes dólares para realizar las importaciones de insumos, materias primas y productos terminados. El resultado es que la escasez está presente en la vida diaria de los venezolanos.

    En junio, de cada 100 productos que los consumidores solicitaron en abastos, supermercados y toda la red de establecimientos que cubre al país, 19 tenían fallas de abastecimiento versus 11,7 en junio de 2012.

    { Para disminuir la escasez el Gobierno tiene en agenda un calendario de aumentos en los precios controlados de alimentos y productos de cuidado personal que impulsarán la inflación.


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